Evaluar el impacto de la implementación de la educación emocional es imprescindible para mejorar. Lo que no se evalúa se devalúa.
Para ello, para implementar actividades y programas de la educación emocional con rigurosidad es importante saber identificar los modelos de programas, distinguir las fases de elaboración de un programa, saber estructurar un programa, conocer las fases en la puesta en práctica de la educación emocional y los tipos de evaluación según sus funciones
Un modelo de educación emocional es como una representación que refleja el diseño, la estructura y los componentes esenciales de un proceso de intervención en educación emocional.
Los modelos de educación emocional son “modelos para”; es decir, sirven de guía para la acción. Su función consiste en proponer líneas de actuación práctica. En este sentido son prescriptivo-normativos. Son la respuesta de la pregunta: ¿cómo?
Los modelos de educación emocional sugieren procesos y procedimientos concretos de actuación. La validez, el funcionamiento y la puesta en práctica de tales modelos deben ser validadas empíricamente a través de la investigación científica, que contribuye a determinar la eficiencia de los mismos.
Diseño, implementación y evaluación de programas